Consumir menos, reparar, reutilizar y reciclar son acciones que protegen el medio ambiente y pueden frenar el cambio climático. Otra alternativa es escoger productos comprometidos en entender cuál es su propio impacto en el planeta, como aquellos que miden su propia huella de carbono.

Tomar decisiones informadas a la hora de consumir productos, es clave para entender el impacto de nuestras acciones. De hecho, como una forma cuantificable de entender este impacto, es que se utiliza el concepto “huella de carbono”.

Pero, ¿qué es la huella de carbono?

Es un indicador ambiental que refleja la cantidad de gases de efecto invernadero (GEI) que producen las actividades económicas y cotidianas del ser humano. Por esta razón, conocer este número (que se expresa en toneladas de CO2 emitidas), puede ayudar a las personas a tomar consciencia e iniciativas para reducirla al máximo posible. Medida que, por cierto, tiene estricta relación con el estilo de vida de la persona. La forma en que nos transportamos o cómo lavamos la ropa en casa, son dos ejemplos de acciones que emiten gases que aceleran el calentamiento del planeta. Por eso la descarbonización a través de la neutralización de la huella de carbono es tan importante.

Cuando hablamos de la huella de carbono de un producto, se refiere a los gases de efecto invernadero emitidos antes, durante y después de su vida útil. Y es que la contaminación puede ocurrir en los procesos que van desde la obtención de materias primas, el procesamiento, la producción y distribución, hasta su uso y posterior reciclaje o desecho.

Eventos como conciertos, competencias deportivas y espectáculos, por nombrar algunos, también generan una importante huella de carbono a través de elementos como el consumo de energía, basura generada y transporte, por nombrar algunos. Por esta razón, cuando los productos o eventos miden su huella, demuestran su compromiso con el cuidado del planeta. Estos son cuatro productos nacionales conscientes de que la acción contra el cambio climático es tarea de todos.

Vinos Gran Reserva

Avanzando hacia la meta de Cero Emisiones de Carbono al 2050, Gran Reserva comenzó a medir su huella de carbono el año 2007 a través de la metodología Greenhouse Gas Protocol (GHG), para identificar potenciales reducciones. Desde entonces, la medición de su huella también incorpora las emisiones de sus proveedores, comprometiéndose con todo el proceso de elaboración. Así, desde el año 2017 Gran Reserva ha logrado reducir su huella de carbono en un 34%, reforzando su misión de sustentabilidad, en la cual incluye su etiqueta hecha de papel 100% reciclado, mientras que las cajas en que se transportan también son de cartón 100% reciclado. Acciones que demuestran su compromiso de elaborar grandes vinos protegiendo los recursos naturales.

Anteojos Karün

Se autodefinen como “anteojos radicalmente sustentables” y vaya que lo son. Pues no solo están hechos con materiales reciclados trazables, sino que al comprarlos también sabes que estás emitiendo menos de la mitad que un anteojo común de la industria, gracias a que han medido y transparentado la huella de carbono de cada uno de sus productos. Esta es la genial idea de Karun, un grupo de personas apasionadas en hacer las cosas diferentes, ubicados en la Patagonia chilena, que crearon estos anteojos de alta calidad que pueden servir como un símbolo de cambio. Así, además del modelo también puedes decidir la huella de carbono, que en promedio es de 1,69 KGCO2e. Se trata de un encuentro entre moda y sustentabilidad que busca dar un ejemplo en la industria de los anteojos. Disponibles en www.anteojoskarun.cl 

Jockey Austerra

Otro producto chileno que porta un mensaje de protección y respeto por el planeta Tierra son los jockeys Austerra. Que, nada más y nada menos, “es el jockey más sustentable del mundo, hecho a mano, con materiales reciclados, y con su huella de CO2 trazada y compensada”. Sus materiales son plástico y metales recogidos de vertederos que procesan y transforman en una nueva materia prima. Además de telas de algodón orgánico que rescatan de descartes de otras fábricas. Los cuales se ensamblan con la energía de dos manos y una máquina de coser. El resultado es un jockey con una huella de carbono reducida y transparente: 510 grs de CO2 por jockey. Para conocer mas sobre este producto puedes ingresar a www.austerra.org

Lollapalooza

Buscando generar su aporte, uno de los festivales de música más importantes de Chile, Lollapalooza, también está dando pasos para ser carbono neutral. Con su propia política de sostenibilidad, el año pasado midieron la huella de carbono del festival (equipo de producción, artistas y público del evento) y lograron compensar 700ton de CO2 en reforestación. También reciclaron 23 toneladas de basura, y la implementación del escenario Aldea Verde fue energizado durante 3 días con energía solar, evitando así el consumo de 260 litros de petróleo. Es su próxima versión programada para los días 15, 16 y 17 de marzo de 2024 en Parque Cerrillos, quieren ir más allá y lograr metas más exigentes. Mas información en https://lollapaloozacl.com/sostenibilidad/